Todo oscuro, sin estrellas, Stephen King | Frases
- Admin
- 28 oct 2017
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"No soy un monstruo; intenté salvarla del Hombre Maquinador".
"Vi también la expresión de pánico despuntando en el rostro de mi hijo, y supe que no resistiría por mucho tiempo".
"«Creo que existe otro hombre dentro de cada hombre, un extraño…»"
"En el firmamento brillaban las estrellas, miles, decenas de miles. Reconocí las constelaciones (Orión, Casiopea, la Osa Mayor y la Menor) que mi padre me enseñara".
"El asesinato es pecado, el asesinato es condenación (de la propiamente y del espíritu, seguramente, incluso aunque los ateos tengan razón y no exista una vida más allá), pero el asesinato, además, significa trabajo".
"Así funciona el mundo, y ¿qué importaba? Cuando el corazón se detiene y el cerebro se asfixia, o bien nuestros espíritus se van a alguna otra parte, o bien sencillamente se apagan".
"Crees que has presenciado la escena más terrible, la que fusiona todas tus pesadillas en un horror demencial que existe en la realidad, y el único consuelo es que nada puede haber peor. Que incluso si te equivocas, tu mente se quebrará ante su visión, y no sabrás nada más. Sin embargo siempre hay un mal peor, tu mente mantiene la entereza, y de algún modo continúas adelante".
"Quizá desees ser tú quien estuviera muerto, pero continúas adelante. Te das cuenta de que te hallas en un infierno de tu propia creación, pero sin embargo continúas adelante. Porque no queda otra cosa que puedas hacer".
"Al final quedamos todos atrapados en artificios de nuestra propia invención. Así lo creo. Al final quedamos todos atrapados".
"¿Y existe el Infierno, o acaso nos forjamos uno propio en la tierra?"
"Si Dios nos recompensa en la Tierra por las buenas acciones, entonces quizá Satán nos recompensa por los actos malvados.
"«Suponer a la ligera hace asno acualquiera»"
"En lo concerniente a la oscura inmundicia del corazón humano no parecía existir límite".
"Permaneció allí sentada durante un momento, tamborileando con los dedos nerviosamente sobre el reposabrazos de la silla, como hacía cuando trabajaba y se quedaba atascada en una palabra, una frase, o una manera de describir algo".
"¿Cuántas identidades insospechadas albergaría una persona, ocultas en lo más profundo de su ser? Empezaba a pensar que el número podría irse a infinito".
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